Madre repartió dulces y tapones de oídos en un avión para disculparse por su bebé

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“Hola, soy Junwoo y tengo 4 meses. Hoy voy a ir a los Estados Unidos con mi mamá y mi abuela para ver a mi tía. Estoy un poco nervioso y asustado porque es mi primer vuelo en mi vida, lo que significa que puedo llorar o hacer demasiado ruido”, decía la carta, escrita como si fuera el bebé el que hablara.

Hay quienes son tolerantes con lo que ocurre y comprenden la naturaleza de un bebé, pero para otros puede resultar sumamente molesto. Esta incomodidad es mayor si ocurre en un espacio cerrado y por mucho tiempo, como suele suceder en los aviones. Es por ello que pocas personas quisieran viajar cerca de un infante.

No obstante, este no solo es un problema de terceros que deben lidiar con los llantos del bebé, sino que la propia madre de la criatura entiende lo que vergonzoso que puede ser este momento. Es por ello que una madre de Corea del Sur tuvo un gesto con los pasajeros que la acompañaron en un vuelo, para pedir disculpas por las molestias que pueda ocasionar su hijo.

Suceso viral

Tal como lo relató el usuario Marc Vidal en su cuenta en la red social Twitter, esta madre pasó por cada puesto de los pasajeros del avión para obsequiarles un kit con dulces y tapones para los oídos, para compensar la incomodidad que generara su niño. Además, dejó una carta para que tuvieran un poco de empatía con ella.

“Hola, soy Junwoo y tengo 4 meses. Hoy voy a ir a los Estados Unidos con mi mamá y mi abuela para ver a mi tía. Estoy un poco nervioso y asustado porque es mi primer vuelo en mi vida, lo que significa que puedo llorar o hacer demasiado ruido. Intentaré ir tranquilamente, aunque no puedo prometer nada“, decía parte la carta.

“Por favor Discúlpame. ¡Así que mi mamá preparó una bolsita de regalos para ti! Aquí tienes algunos dulces y tapones para los oídos.Por favor, úsalo cuando sea demasiado ruidoso por mi culpa. Disfruta tu viaje. Gracias“, agregó.

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De acuerdo a Vidal, este fue un vuelo de 10 horas desde la capital de Corea del Sur, Seúl, hasta la ciudad californiana de San Francisco. La mujer tuvo que repartir unos 200 kits en todo el avión. Esta mamá recibió aplausos en redes por su empatía con los demás.