Esta pandemia por la COVID-19 generó que muchas ‘ollas comunes’ cierren para evitar el contagio de las personas. Ahora, con las nuevas medidas, esta mamita sacó fuerzas para apoyar.

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Joven lideresa

Flor Sotelo Lozano es la joven mamita lideresa de una de las ollas comunes beneficiadas es la Asociación Cielo Azul. Desde el 15 de julio, esta guerrera se alista para brindar alimento quienes lo necesitan en su localidad.

Natal de Huarochiri, esta joven alista las ollas y sartenes para salir a cocinar. “¡Ya! ¡Suenen la alarma! Avisen que la comida está lista”, dice al terminar los alimentos.

Por otro altoparlante se anuncia que el almuerzo está servido. Al llamado acuden, vecinas y vecinos que llevan en sus manos recipientes para recoger lo preparado.

Mamita de dos

“Salí de mi pueblo para progresar y sigo en la lucha. Mi tierra es verde y acá falta casi todo, incluso el agua. Pero no retrocedo”, cuenta a una conocida agencia.

Ella tiene 30 años, activa a diario la olla común, una de las 98 que funcionan en el distrito de Pachacámac para que salgan 120 raciones de almuerzo preparados con cariño.

Es mamá de un niño de 12 años y una niña de 10, a quienes demuestra que el trabajo duro recompensa, sobre todo si es para beneficiar a muchas familias.

“Me siento feliz al brindar un plato de comida a mis vecinos. La olla común nos ha unido como asociación. Acá, en Cielo Azul, hay muchas carencias, niños con discapacidad y muchos adultos mayores a los que ayudamos”, comentó.

📢 #Inspiracional | Este noble señor, se llevó el apodo del "Agricultor del pueblo" por sus méritos altruistas 🥰https://t.co/RfF6I4ukGD

— La Karibeña (@karibenape) October 27, 2020